lunes, 28 de octubre de 2013

EL FUTURO HITO ARQUITECTÓNICO DE BILBAO


La torre BBK sale a escena



La arquitecta Zaha Hadid presenta en su web el rascacielos diseñado para Zorrotzaurre 
Levanta 22 pisos más un bloque anexo que sirve de lobby y ofrece servicios para los clientes

Montaje con el eficiio de BBK, el futuro puente para el tranvía y, al fondo el puente que se construira a la vez que la apertura del canal de Zorrotzaurre
Montaje con el eficiio de BBK, el futuro puente para el tranvía y, al fondo el puente que se construira a la vez que la apertura del canal de Zorrotzaurre (Zaha Hadid Architects)

BILBAO.
 Un rascacielos con 22 plantas de altura cuya estructura se centra en dos estrellas de cuatro puntas fusionadas, más un edificio anexo que alberga el hall de entrada y diversos servicios para los clientes. Así es la torre que la famosa arquitecta anglo-iraquí, Zaha Hadid ha diseñado para que se convierta en la futura sede central de la BBK y Kutxabank. Ubicada en la punta de la futura isla de Zorrotzaurre que mira al centro de Bilbao, el singular edificio está llamado a ser el buque insignia de la próxima extensión urbanística de la villa.
El propio estudio de la premio Pritzker 2004 (considerado el Nobel de la Arquitectura) ha desvelado los entresijos del espectacular conjunto al presentarlo en su página web con profusión de detalles. Varias infografías de cómo quedará el rascacielos en la exclusiva parcela que lo albergará, vistas cercanas de ambos edificios pegados y recreaciones del interior de diversas plantas acompañan a la descripción conceptual redactada por el equipo de Zaha Hadid.
Con 22 plantas de altura, que alcanzan casi los 105 metros con la corona que culminará el edificio, la torre BBK se articula en dos elementos con gran personalidad. La más espectacular y visible es la torre, casi una escultura en formato gigante. La web explica cómo se establece una estructura "definida por dos planos en forma de estrella giradas 45 grados una de la otra en la parte superior e inferior de la torre". Las dos se funden a la mitad del edificio, de manera que los puntos exteriores de una estrella se convierten en los puntos interiores de la otra.
CUATRO FACHADAS INVERSAS Ello provoca que las cuatro fachadas sean inversas dos a dos y que el perfil del monolito cambie a medida que el espectador se pone a un lado o a otro del edificio. Pero hay más. Las principales líneas de esta torre-escultura se definen "por un exoesqueleto que sirve tanto de estructura primaria de todo el bloque como de sistema de apoyo para la subestructura que contienen las fachadas", indican en la explicación. Ello genera un bella osamenta de color blanco, con segmentos ligeramente curvados de diferentes longitudes, que albergan en su interior los ventanales con vidrio. Una solución que se complementa con la creación de un núcleo central de servicios, con forma redonda, y que dispone de seis ascensores, un montacargas y dos escaleras fijas, además de los correspondientes cuartos de maquinaria y los dos grupos de aseos para uso de cada planta. Este concepto de agrupar en el interior del rascacielos todos los elementos comunes permite, según indica el equipo redactor, "eliminar la necesidad de columnas interiores dentro de la torre". Es decir, oficinas totalmente diáfanas.
En los planos se especifica asimismo la distribución de plantas. De la baja a la segunda serán para uso de la Obra Social de la entidad financiera. Los pisos 3 y 4 albergarán un auditorium, salas de reuniones y otros espacios que complementen la actividad oficinista. Desde la planta quinta a la decimoséptima, despachos para los empleados, el piso 18 acogerá el centro de procesamiento de datos y el 19 las instalaciones mecánicas que todo edificio necesita para funcionar.
Las últimas dos alturas, 20, y 21, son para las oficinas ejecutivas, dedicando el nivel más alto, el 22, a una estancia VIP. Una planta de 7 metros de altura (el resto de la torre miden 4) con grandes ventanas panorámicas y que cuenta con tres comedores y una zona de bar. Una corona de cuatro puntas se encarga de culminar el rascacielos a los 105 metros referidos, equivalentes a dos tercios de la Torre Iberdrola, su némesis en el futuro skyline bilbaino.
La otra pieza del proyecto es el edificio anexo, el que denomina Zaha Hadid pétalo o pódium. Explica que "la base de la torre se funde con elpétalo" un edificio de acceso alagardo donde se encuentra el hall para entrar y salir del rascacielos, una especie de calle principal con servicios bancarios y diversas zonas para actividades que organice la Obra Social.
En su descripción indica que "este pódium evita la habitual característica de pedestal que presentan otras torres" y sirve, asimismo, para que "la torre interactúe directamente con el suelo, lo que mejora su propia porosidad visual".
En las infografías mostradas en la web se viste el rascacielos con un entorno de jardines y paseos peatonales donde se integra a la perfección el trazado del tranvía, cuyo recorrido está previsto por esta zona. De hecho, también se recoge el puente que se creará en exclusiva para que este transporte público acceda a la isla desde el puente de Euskalduna, nexo de unión con su actual trazado.
Zaha Hadid, autora también del plan urbanístico de todo el conjunto de Zorrotzaurre, se muestra orgullosa de su última obra para Bilbao. De hecho, para la arquitecta y su equipo la torre "representa la oportunidad de desarrollar en arquitectura tangible el concepto urbano de Bilbao que previamente hemos elaborado en el Master Plan"
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