Miguel Zugaza dejará la dirección del Prado este viernes, tras ayudar a la pinacoteca madrileña a convertirse en una de las instituciones culturales de mayor proyección internacional. Y lo hará tras el nombramiento de su sucesor en la pinacoteca madrileña. Será hoy, en un Pleno extraordinario del Patronato, cuando se apruebe formalmente la candidatura de Miguel Falomir, que ha sido su mano derecha en los últimos años, para ocupar la dirección del Prado. Una candidatura que cuenta con la unanimidad de la comisión encargada de valorar los perfiles de quienes podrían sustituir a Zugaza.
La propuesta se elevará posteriormente como iniciativa al ministro de Educación, Cultura y Deporte, Iñigo Méndez de Vigo. Finalmente, el nombramiento del nuevo director deberá ser aprobado por el Consejo de Ministros, a propuesta del ministro, que previsiblemente será este viernes.
Tras su inmediata publicación en el Boletín Oficial del Estado, el historiador y museógrafo durangarra volverá a ocupar su sillón como director del Bellas Artes de Bilbao, un museo que forma parte de él, como ha confesado en numerosas ocasiones. (Zugaza ya dirigió el Bellas Artes entre 1996 y 2002).
Hoy también está previsto que se reúnan los miembros del Patronato del Bellas Artes de Bilbao, cuya presidencia ostenta este año el consejero de Cultura, Bingen Zupiria, para oficializar el relevo y la sustitución del actual director del Museo, Javier Viar, que emprende el camino de la jubilación. Por lo que la incorporación de Zugaza al museo bilbaino se producirá inmediatamente después de su cese como director del Prado.
El aún director del Prado se despidió este lunes del museo en el que seguramente fue su último acto público, durante la presentación del proyecto que el artista contemporáneo chino Cai Guo-Qiang realizó en el Salón de Reinos. Zugaza ha reconocido que la etapa que retoma en el Bellas Artes le dará la oportunidad de trabajar no solo en relación estricta con el pasado “ni con la tradición antigua”, sino analizar el arte contemporáneo y el arte específico de la capital vizcaina. Ha confesado además que ya tiene “ideas en mente” sobre la primera exposición en el Bellas Artes, aunque no ha querido de momento desvelar nada más.
El prestigioso historiador ha seguido manteniendo una gran relación de colaboración desde Madrid con el museo bilbaino y siempre le ha manifestado su cariño y admiración. “Es uno de los más interesantes de Europa. Junto al Guggenheim refleja la sensibilidad que han tenido la sociedad y las instituciones vascas por el arte”, ha asegurado en varias ocasiones.
Las conversaciones entre las instituciones vascas y el todavía director del Prado duraron meses y se mantuvieron en la más absoluta discreción hasta conseguir el “sí” de Zugaza. Ahora, regresa con una maleta repleta de experiencias, proyectos ambiciosos y contactos con instituciones internacionales, de los que se beneficiará la pinacoteca, Bizkaia y la cultura vasca. Un fichaje “galáctico” para el museo bilbaino, como reconoció el ministro de Cultura cuando le comunicó entonces su dimisión del Prado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario