El futuro de Bilbao comienza a concretarse con infografías y leyendas. El pleno del Ayuntamiento aprobó ayer un primer avance de un documento que pone los «cimientos» del modelo de ciudad, dibujando viviendas, parques y carreteras para atraer actividades económicas. El Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) volverá a revisarse en diciembre y no se espera que entre en vigor hasta dentro de dos años, pero al menos hasta 2035 será la ley que vele por el desarrollo de la villa, incorporando propuestas de oposición y vecinos. Su misión será la de «continuar con la transformación de Bilbao», explica el concejal de Planificación Urbana, Asier Abaunza.
El reto es de gigante, ya que el actual plan, de 1995, sacó a la ciudad de su decadencia con emblemas como Abandoibarra y el Guggenheim. Y el desafío de
Bilbao es seguir despertando la admiración internacional para 'fichar' talento e inversiones. Pero también, hacerse más amable. De momento,
la ría se ha garantizado un gran protagonismo en el «mapa».
Saldrá reforzada como columna vertebral de la villa y elemento integrador, con paseos de ribera kilométricos y playas y piscinas urbanas en Elorrieta, «uno de los hitos» en un barrio que, limpio de industrias y sin las cocheras de Bilbobus, se convertirá en un nuevo paradigma de transformación. Las orillas de la ría demandan desde hace años más puntos de unión, que se sumarán a los catorce existentes. Habrá cuatro nuevas pasarelas peatonales que unirán Elorrieta-Punta Zorroza, Sarriko-Zorrozaurre, Olabeaga-Zorrozaurre y Atxuri-Urazurrutia.
Éstas se sumarán a los tres puentes ya previstos en la isla de Zorrozaurre. La arquitecta Zaha Hadid soñó la isla con ocho viaductos, pero la crisis los redujo a cuatro, al menos por ahora. Uno de ellos, el de Frank Ghery, ya está en servicio, a falta de que el canal de Deusto se abra para que cumpla su función; el segundo lo pondrá en marcha el Gobierno vasco en San Ignacio en abril -lo paga la promotora de vivienda pública, que construirá en la zona-; el tercero unirá la isla con Punta Zorroza; y por el cuarto el tranvía sobrevolará la ría desde Olabeaga.
La transformación de Zorrozaurre servirá como motor para la regeneración de toda la ribera entre Erandio y Deusto. Los cambios se verán pronto, porque después de Semana Santa, la junta de concertación de Zorrozaurre adjudicará las obras para convertir todos los muelles entre Elorrieta y la rotonda del Euskalduna en un gran paseo de más de dos kilómetros, repleto de zonas deportivas y de recreo.
La desaparición del tráfico ferrovario entre Bolueta y Atxuri a partir del verano también liberará una línea que será aprovechada por el tranvía, lo que permitirá que este barrio se asome a la ría, así como prolongar el Paseo de Los Caños hasta el puente de San Antón. «Es una de nuestras máximas, que todos los paseos fluviales desde Etxebarri hasta Erandio y hasta Barakaldo sean transitables, sin interrupciones para el peatón», explica Abaunza. Por ejemplo, se podrá ir andando por la ribera desde Erandio a Bolueta.
Bilbao ganará al mismo tiempo en parques. Se crearán en las faldas del monte que crece en Elorrieta y San Ignacio, en Bolueta y Zorroza. El centro también vivirá su transformación por la llegada soterrada del AVE, que cerrará la trinchera que mantiene la cicatriz urbanística y social entre Abando, Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala: se generará un parque central de 40.000 metros cuadrados que «hacía mucha falta en esta zona de Abando», dice Abaunza. También se ampliará el anillo verde de la ciudad y se reforzarán los grandes parques urbanos, procurando que la mayor parte de los vecinos tengan uno a menos de 15 minutos de su casa. Habrá en total 2.830.000 metros cuadrados de zonas verdes, 7 por habitante.
Bilbao siempre soñó con ser una ciudad universitaria y desprenderse del estigma de tener a la «
UPV» subida en un monte de Leioa. Ahora, se tratará de enmendar ese error histórico.
Se impulsará la ampliación del Campus de Deusto, de la UPV y la implantación de la
Universidad de Mondragón.
El tranvía se extenderá hasta
Bolueta desde
Atxuri, hasta Abando desde Basurto y hasta Olabeaga por Sagrado Corazón.
También llegará a la futura isla desde Punta Zorroza. Se soterrarán las vías de Feve y Renfe en ese barrio y Olabeaga, se prevé
el derribo del viaducto de Rekalde y un nuevo túnel entre Amezola y Miribilla. El de Deusto queda descartado, «aunque se reservan los terrenos por si se cambia de opinión». En el mapa de Bilbao también se ha dibujado la Línea 4 hasta Rekalde.