O sea que es verdad que no hay que hacer nada.Interesantísimo, didáctico y muy dadá.Muchas gracias.
Me quedé fascinada cuando lo ví, pertenecia a dos chicos jóvenes africanos que estaban intentando venderlo como chatarra.
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.
O sea que es verdad que no hay que hacer nada.
ResponderEliminarInteresantísimo, didáctico y muy dadá.
Muchas gracias.
Me quedé fascinada cuando lo ví, pertenecia a dos chicos jóvenes africanos que estaban intentando venderlo como chatarra.
ResponderEliminar